Detectar las señales de alerta de nuestro sistema de frenado y actuar en consecuencia es de vital importancia para nuestra seguridad en carretera. ¿Sabías que las pastillas de freno al entrar en contacto con el disco produce una fricción en cada frenada que, con el tiempo y el desgaste, las lima, perdiendo su eficacia? Con esto en mente, se hace evidente que saber cuándo cambiar las pastillas de freno es de vital importancia para el correcto mantenimiento del vehículo y prolongar su vida útil.
El desgaste de las pastillas viene ocasionado por el uso y el paso del tiempo. Debido al desgaste continuo al que son sometidas, la mayoría de fabricantes recomiendan cambiar las pastillas de freno cada 10.000 kilómetros. No obstante, ante la menor sospecha de deterioro o mal funcionamiento lo aconsejable es proceder a su cambio. El grosor mínimo recomendado es de 2 mm. Si la superficie de contacto es menos gruesa de lo recomendado, puede provocar daños en los discos de freno.
El grado de desgaste de las pastillas depende del uso pero también del tipo de conducción. Las aceleraciones y frenadas bruscas tienen como consecuencia que el desgaste se acelere. Sin embargo, una conducción progresiva y eficiente repercute de forma positiva en el cuidado del medio ambiente pero también en el ahorro de combustible y el correcto mantenimiento de otros materiales del vehículo como el sistema de frenado.
Tipos de pastillas de freno
Antes de aprender cómo y cuándo cambiar las pastillas de freno, vamos a repasar los diferentes tipos. Dependiendo del material que usen, las pastillas de freno pueden ser:
- Cerámicas: compuestas por cerámica y fibra de cobre que controlan la tendencia del freno a perder potencia a temperaturas más altas.
- Orgánicas: compuestas por el grafito, resinas y fibras. Generan menos calor que las metálicas y este tipo de pastillas necesita un rodaje en los primeros kilómetros.
- Semi metálicas o metálicas: compuestas por materiales de fricción como el hierro. Tienen mejor frenada en condiciones de mojado que los otros tipos de pastilla una duración de 15. 000 kilómetros.
Síntomas de un mal funcionamiento del sistema de frenado
Usar unas pastillas de freno desgastadas o en mal estado no sólo puede provocar daños en los frenos sino restar eficacia a su funcionamiento. Una de las señales que indican que las pastillas de freno de nuestro coche están desgastadas es un sonido chirriante al frenar. Esto sucede cuando las pastillas están por debajo de su nivel de seguridad. El chirrido puede alertarnos de un desgaste en el disco aunque también puede deberse a la fricción provocada por las partículas de polvo que quedan atrapadas entre pastillas y discos. En todo caso, es una señal de alerta que debemos tener en cuenta para consultar con nuestro mecánico.
Para saber cuándo cambiar las pastillas de freno pordmeos comprobar si su estado es el adecuado revisando visualmente el espesor de las pastillas que localizarás al quitar el neumático y acceder al sistema de frenado (disco y pastilla). Las pastillas suelen tener un indicador de grosor mínimo y, en caso de que no lo tengan, su grosor debe ser superior a 1-1,5 milímetros. Algunos vehículos disponen de un testigo luminoso en el cuadro de mandos con las letras ABS que alerta de un mal funcionamiento.
Una vez comprobado el estado y realizado el cambio de pastillas, se aconseja que en los primeros 100 kilómetros se utilice el freno con suavidad y sin brusquedad para garantizar la vida útil de las pastillas.
Correcto mantenimiento del vehículo y distancia de frenado
Las pastillas de freno son esenciales dentro del sistema de frenado del automóvil, proporcionan la fricción necesaria a los discos de freno para que cuando accionamos el pedal, nuestro vehículo se detenga. ¿Sabes cómo afectan las pastillas de freno en mal estado a la distancia de frenado? La distancia de frenado es el trayecto recorrido desde el instante en que se pisa el pedal de freno hasta el momento en el que el vehículo se detiene por completo. En la distancia de detención de un coche influye el tiempo de reacción(entre 1 y 1,5 segundos es el tiempo que un conductor tarda en reaccionar y activar el freno, durante ese tiempo el coche sigue rodando a igual velocidad), y la distancia de frenado (la distancia que el coche recorre hasta que el sistema de frenado detiene totalmente el vehículo). A mayor velocidad, más distancia para detenerse. Pero además de la velocidad y el tiempo de reacción influyen otros factores como la carga del vehículo, el estado del firme, la climatología (el temido aquaplanning), el estado del vehículo… Y es ahí donde las pastillas de freno y su correcto mantenimiento juegan un papel importante.
Cómo cambiar las pastillas de freno
Cambiar las pastillas de freno no es una tarea sencilla. Es recomendable dirigirse a un taller especialista para realizar esta tarea con la seguridad y las garantías necesarias. Las pastillas de freno se componen de un revestimiento y de un soporte metálico. De ellas depende mantener una correcta distancia de frenado. Normalmente, un coche está equipado con dos pastillas de freno por cada disco de freno. Es posible encontrar diferentes modelos de pastillas para el mismo vehículo con formas y dimensiones diferentes.
Las pastillas de freno se desgastan más rápido y se cambian con más frecuencia que los discos de freno. Para su sustitución debes seguir una serie de pasos:
- Gira la dirección del coche y afloja los tornillos de la rueda
- Eleva el coche, quita el neumático y localiza las pastillas de freno para extraerlas.
- Cuando retires las pastillas de freno de las pinzas, es buena idea marcar sus sentidos y posiciones, esto le permitirá no cometer errores durante el montaje.
- Introduce las nuevas pastillas de frenos y monta de nuevo la rueda.
- Pisa el pedal de freno hasta que cueste accionarlo. Esta fase permite acercar las pastillas al disco y permitir el primer frenado.
- Comprueba el nivel del líquido de frenos procurando que no sobrepase el volumen máximo.
Cambiar las pastillas de freno de manera habitual y comprobar que su nivel de desgaste es el adecuado para el correcto funcionamiento del vehículo es una tarea básica de mantenimiento que permitirá alargar la vida útil de nuestro sistema de frenado repercutiendo en la seguridad en carretera de nuestro coche.
Fuente: kilometrosquecuentan.com
NEUMÁTICOS MANUEL MORALES
facebook.com/neumaticosmanuelmorales
C/ Luis de Góngora, 21, Umbrete, Sevilla
Tfno. 955 715 172 / 607 658 153
What do you think?